sábado, 12 de diciembre de 2009

Tell me what the fuck is going on

“Lo poco que sé de la vida se cuenta tomando un café, se entiende tomando una copa y se olvida tomando dos”.

Para París siempre estaremos ahí, Saint-Michel nos mirará extrañado mientras bebemos cerveza y tarareamos canciones de Lou Reed. Sinceramente, para Londres creo que me he hecho mayor, atrás quedaron los paseos por Oxford Street y los cafés en algún recoveco de Nothing Hill. Nueva York no está nada mal, aún recuerdo la interminable espera en un ascensor para llegar a la cúspide del apabullante Empire State. Todavía podría matarme lentamente en Ámsterdam si mis pulmones lo soportaran, pero francamente, esa época ya pasó. De Nueva Delhi destacaría el caos de sus calles, la depeción del Taj-Majal y recorrer el norte del país en una wolksvagen del 85. Para Buenos Aires todo son palabras buenas, por no hablar del frío polar de Usuhaia y de los cachalotes de Península Valdés. Ojalá pudiera volver a las calles de Cork y a los desayunos dominicales de bacon y huevos fritos en mi casa de Killarney. Malta no estuvo mal durante tres veranos, el tequila condicionó cada noche de mi estancia allí. Barcelona no está nada mal durante el Sónar y reconozco que echo de menos perderme en el barrio Gótico. Sin embargo, hay una ciudad que me resulta distinta, pero no distante...Pongamos que hablo de Madrid.

lunes, 31 de agosto de 2009

rocknrolla

Leo una revista en la que todo son rostros perfectos, vestidos caros, maquillajes increíbles y efectos de photoshop abrumadores. ¿Quien no quiere ser así? Nunca pensé que una revista pudiera tener tantos efectos secundarios sobre mí.


Yo, como todos, también busco la fama, el dinero, el sexo, el reconocimiento profesional, el marido perfecto, el amante imperfecto, los hijos guapos, los amigos selectos....pero quiero algo más.


Quiero que mi vida tenga una banda sonora de fondo, a todas horas, en cada momento la canción adecuada. Ojalá mi vista fuera perfecta, para así no perderme nada de lo que vivo cada día. Me gustaría comprarme una furgoneta Volkswagen Bully y recorrerme todas las playas de la península, sin saber qué será de mi mañana. Tampoco es que le haga ascos a la idea de casarme con un ricachón y esperar ansiosa el momento de su muerte, para qué nos vamos a engañar. Quiero que el ambientador de mi casa sea de gasolina, y que mi casa con olor a gasolina tenga una ventana con vistas a la toscana, otra con vistas a la campiña francesa, y otra con vistas a los rascacielos de Nueva York. Ojalá Belén Esteban fuera mi vecina. Siempre he querido un gato gris ceniza, para comprarle uno de esos parques de juegos enormes que venden en las tiendas de animales y que tanto rato paso observando. ¿Sabéis qué me gustaría también? Una puerta, que cuando la abres hay cien personas aplaudiendo y vitoreando tu nombre, y estarían disponibles las 24 horas al día. No es que no quiera hacerme mayor pero...no estaría nada mal que los 19 duraran dos años, los 20, tres, y así sucesivamente. Ojalá los padres no gritaran tanto.


Me fumo un cigarro deprisa y corriendo porque muchas ideas vienen a mi cabeza y no quiero olvidarlas. Hace calor, y la silla empieza a hacer coalición con mis piernas para que no pueda levantarme nunca más.


Dejando a un lado mi catastrófica cabeza, no chapo el chiringuito sin proclamar a los 4 vientos mi alegría por la vuelta de Alvaricho del jodido continente australiano. "Is nice to have you back again, darling!"





domingo, 28 de junio de 2009

NO STRESS

...dice la canción. Y cómo no, le rindo homenaje. Sí señores, desde el 9 de junio estoy de vacaciones, en realidad fueron vacaciones condicionales hasta el 15, el día en el que un agradable a la par que feliz mensaje de texto de UCH CEU llegó a mi móvil informándome de que todo lo tenía aprobado. La felicidad fue doble, poque pimpattpum estaba conmigo y ella también lo aprobó todo (para aquellos que no lo sepan, mi carrera la hacemos las dos). Y para celebrarlo, y haciendo homenaje a nuestro gusto por las cosas ostentosas y extremas, nos fuimos a celebrarlo a la isla pitiusa, Ibiza. Todo son palabras buenas hacia esa isla, desde la música (musicón, David Guetta en directo, pablo Koppanos, Juanjo Martín etc etc) hasta la gente, todo ha sido perfecto.

Y ahora poco más puedo decir, mi verano todavía es una incertidumbre, los planes van surgiendo en el día a día, y exceptuando alguna esapadita me parece a mi que como en casa, en ningún sitio.





MTV




Bora Bora

David Guetta playing

Supermartxé en Privilege

Ses salines
Solo decir...a Álvaro que le voy a echar muchísimo de menos, aunque el me haya sustituido por la barrera de coral, canguros, koalas y Perth durante dos meses.
(La chica del metro*)

lunes, 15 de junio de 2009

Biografía de dos Vol.I


Oh sí, conversaciones filosóficas acerca de la vida y la muerte. Aspiraciones, deseos, ambiciones, temores, decepciones, p á n i c o s .

Vivir juntas o separadas, igual da. Ser conocedora y partícipe de pensamientos ajenos, de teorías subjetivas de autores desconocidos. Memorizar diálogos de Blair, Javier, Sebastián o


Mufasa, sin importar el qué o el quién.


Comer emanems a altas horas de la madrugada en la playa, reírnos, charlar, y volvernos a reír más y más fuerte, para que el mundo entero lo sepa. Llorar, llorar como el día que el médico te dio tres golpes en la espalda, y llorar para que los seis mil millones de personas que habitan la tierra se hundan contigo. Nos van los extremos, pasamos de lo intermedio y las medias tintas.


Amor. Amor. Amor. Qué gran sentimiento aquel con el que convivimos día a día, cada mañana diferente, cada tarde nuevo.


Palabras grandes que nos llenen la boca, H E C A T O M B E, y las que nos hacen sentir cultas; estirpe, monopolio...qué se yo.


Odiar a los quioscos por encima de todas las cosas.


Soñar con grabar videoclips en el coche, y en cualquier buena escalera de mármol que se precie. Posar en el espejo al salir de la ducha, sentirnos guapas.


Discutir, discrepar, chillar, gritar, odiar, matar. Por ahora lo último no, tiempo al tiempo dicen los más sabios.


"Nunca más vas a vivir este momento", disfrutar lo llamamos nosotras. Día a día, cada hora, cada minuto, cada segundo. JOKES ARE NOT ACCEPTED.


Nula tu concepción del tiempo, algo exquisita la mía. Lenta, rápida, tranquila, nerviosa, pesimista, optimista, cómica, dramática. Polo sur y norte. Haití en el continente africano.


Cerveza, qué gran compañía.


Mamá, papá, me voy de casa. Cayetana, Macarena, Violeta, Adriana, Hugo, Hector, Mauro, Mateo, Andrea y Gonzalo. Juntos pero no revueltos.


Hombres que nos vuelven obsesivas, que nos hacen perder metros y madrugar sin razón aparente. Reina la discreción.


Sueños, planes, objetivos, nunca faltan, en todos siempre tú y yo. (Volvemos a simular una pareja)


Cartas a famosos a raudales, pasado oscuro, en ocasiones mejor no recordar.


"Horrible", "bebé", parte de nuestro vocabulario.


¿No reconocer las cosas? Primer tomo de la Enciclopedia de la Autodestrucción.


Forever young, Bittersweet symphony, diferente melodía, igual contenido. Algo así como nosotras.




Y...bien, tengo mil ideas que plasmar aquí, demasiadas y muy confusas, creo que lo dejaré para el vol.II
(La Chica del metro*)


martes, 5 de mayo de 2009

Un respiro al corazón



Irene [véase foto] me enseñó ayer un video en youtube con esta carta de amor, no tengo información de quienes son los protagonistas, solo se que se llama "poema a Lucia" y que moriría por que me lo escribirán a mi.


Pero como no es así TODAVÍA (destaco todavía porque sigo soñando con príncipes azules, largas cabelleras y balcones) me limito a transcribirlo aquí, tomándome la libertad de haberla adaptado a mi propia "historia de amor" (sin pelos largos ni balcones y un medio príncipe azul que sé que nunca lo leerá, pues esto es medio secreto) y eso sí, identificándome totalmente con el autor de este agradable texto.



"Bien, siempre olvido decirte lo que realmente importa, siempre me quedo sin palabras cuando hablo contigo, son tantas las cosas que quiero decir que siempre me asalta esa especie de inseguridad en mis argumentos...olvido decirte cuán importante tú eres para mí.


Yo, una idiota enamoradiza, dejo que desear en todo lo que toco, en todo lo que pretendo plasmar, Nunca acierto en la diana, siempre doy vueltas y más vueltas y cuando paro, tú vuelves a estar a cientos de quilómetros de aquí.


Siempre he creído que lo que se expresa escribiendo no se es capaz de volver a reproducirlo hablando, y esa es mi cruz, ser vulnerable a lo que siento, albergar la duda de si esta vez pasará.


LLevar esta amistad, esta complicidad en silencio, en el letargo de la oscuridad me está haciendo crecer como persona y cuanto menos como amante fugaz de cualquier hombre que se acercara. Estoy aprendiendo de ti, no sé el qué ni el cómo, pero siento la necesidad de desafiar al mundo tras hablar contigo, siento la prepotencia de mirar por encima del hombro al planeta tras colgar la conversación de rigor en la cual alimentas algo más que este vacío que a veces me abduce...alimentas mi corazón.


Probablemente una de las mejoras cosas ocurridas hasta el momento haya sido dar contigo, y mejor aún, saber a ciencia cierta que es real. Pasa el tiempo y esto funciona. Seguimos al pie del cañón con esas ganas dementes a la par que tranquilas de de conocernos más y más, de saber mucho más que cualquiera el uno del otro. Te echo de menos.


Todo siempre es mucho más sencillo y como tal mucho más duro que la misma realidad, y como tal, valga la redundancia, mucho más cercano.


Quisiera pregonar lo mucho que me gustas a voces sordas, como una quinceañera que jura amor eterno a un amor de verano. Quisiera gritar este vacío de no tocarte, quisiera llorar las noches que no estás aquí y que pagaría por que lo hicieras, pero me quedo con el consuelo de saber que cobraré todos los intereses. Mientras tanto, pago aduana al cruzar un mensaje a tu móvil, pago el impuesto revolucionario por haberte conocido, pero me siento especial por sentir bajo mi piel lo que me transmites y eso me hace ser algo más que un personaje anónimo destacado entre tanto sentimiento por atar.


Son tantas las cosas que te quiero preguntar, tantas vivencias que quiero compartir, son tantas ganas de seguir tu rastro que no me veo capaz de empezar yo sola. Es inevitable, juegas un papel clave en esta partida de ajedrez que no es más que mi vida."

Te echo de menos

(La chica del metro)


"¡Is nice to have you back again, darling!"


No sé por qué coj*nes cuando estoy mucho tiempo sin escribir en estos lares comienzo a tener una presión y un sentimiento de culpabilidad por no hacerlo, como si tuviera que rendirle cuentas a alguien. En realidad, creo que las cuentas me las debo a mí misma y ya que no escribo en el periódico tendré que practicar mi increible don para la escritura en estos blogs, cual moderna que trata de abrirse un hueco en el mundo cibernético. En realidad, estaba frivolizando, me gusta escribir aquí, solo que el don de la constancia no habita en mi y no siempre estoy inspirada, por lo que abandono esto durante meses para volverlo a retomar después. No sé, reflexiones a media tarde supongo.


Atentamente:


La Chica del metro


miércoles, 29 de octubre de 2008

"I wanna live...


...do you really wanna live forever young?"
Puede que sí, puede que no. Deja que me lo piense...

martes, 28 de octubre de 2008

Una noche un tanto surrealista, supongo

Llevo 32 minutos pensando como puedo empezar un texto que probablemente leerás tú y dos personas más. No sé como hacerlo. Las ideas se me amontonan en la cabeza, pero no hay orden lógico de ordenarlas.
Habrá gente que dirá que tiene un día malo, otros más pesimistas dirán que son temporadas, y las personas más dramáticas dirán que toda una vida. Esos problemas que no nos dejan dormir, lo que nos vienen a la cabeza nada más levantarnos, los que no se van en todo el día y los que cuando te acuerdas te da un vuelco el corazón. Yo, la verdad, no los suelo tener todos de golpe, depende del día, de la hora y del lugar. Tú sin embargo no los tienes nunca.
Probablemente seas una de las personas más maravillosas que he conocido en los últimos meses, o tal vez he de decir que te conozco de casi toda la vida. No lo sé. Unas veces me da la impresión de que somos amigas desde hace muchísimo y no me quedan demasiadas cosas por saber de ti, pero en días como hoy me doy cuenta de que necesitaría más de una vida para conocerte, lo cual, me alivia y me asusta a la vez. Lo que sí que sé es que eres de las pocas personas que me saca una sonrisa de buena mañana, que me entretiene con tus historias y que me hace reir con tus ocurrencias...


Llegas temprano a la estación, dejas tus problemas y cojes el primer tren que pasa.

miércoles, 22 de octubre de 2008

"There's nothing you can sing that can't be sung"





Después de varios meses teniéndola en mis archivos casi olvidada, hace unos días decidí que ya era hora sentarme en el sillón a verla. Y la verdad, la pereza del principio desapareció en el preciso instante en que comenzaron a cantar "All my loving". Sí, estoy hablando de la película "Across the universe"
Muchos dirán que han destrozado por completo las canciones de los Beatles, pero a mi me puso la carne de gallina en más de una ocasión, además de hacerme sonreír en varias escenas. El contenido es bastante típico; chico se marcha a América, chico conoce chica, se enamoran, guerras, revoluciones, y drogas a finales de los 60.





Tal vez me haya gustado tanto porque crecí con esas canciones. Mi padre es un fan total de los Beatles, y pasábamos horas y horas en el coche viajando de un sitio a otro con esta banda sonora de fondo. Pero ahí no acabó todo: cuando se pasa la época de "escucho lo que todos escuchan" recuperé el cd perdido entre la colección de mi padre, y pasaron de ser la "música del coche de mi padre" a ser mi música, la que llevo en el ipod, la que suena en mi habitación y la que ahora yo llevo en mi coche.





Hace poco leí un artículo que hablaba de ellos, de cómo es posible que con lo que ha cambiado la sociedad y los gustos de la gente, siga sonando en cualquier bar, en las emisoras de radio y en las cabezas de miles de personas 40 años después. Y sobretodo, me doy cuenta de ello cuando mi sobrina de 4 años tararea por la casa el "Yellow submarine" que todos hemos cantado alguna vez...increíble pero cierto.





Y ha sido precisamente esta película culpable de que lleve tres días en el metro con mi querida amiga Andie Anderson con los Beatles sonando canción tras canción, que, aunque luego modifiquemos las canciones a nuestro antojo, no paramos de cantarlas una tras otra.





Supongo que ahí está la magia de estos señores.





lunes, 22 de septiembre de 2008

LA NUEVA ERA

Me siento un poco "obligada" a volver a escribir por aqui, ya que cuando hoy en clase nos han preguntado que cuantas veces soliamos escribir, yo simplemente he agachado la cabeza...asique tomaré esto como un ejercicio más, ya que la profesión de periodista a la que me quiero dedicar es básicamente esto, ni más, ni menos. Además, mi querida amiga y futura compañera de trabajo se ha abierto un blogspot también ( otro elemento más de la Generación Yo), y oye, me ha vuelto a picar el gusanillo...
Cuando durante estas dos semanas me han preguntado por qué quería ser periodista, nunca he tenido una buena razón para contestar: ¿porque quiero estar informada? ¿porque me gusta transmitirle cosas a la gente? ¿ por vocación? ¿por eliminación? No lo sé, la verdad, solo sé que es lo que he querido durante años y que al menos eso debe significar algo...
Son muchas emociones en muy poco tiempo, empezaré a trabajar en la radio pronto, y es algo que me gusta, pero que a la vez, me asusta no dar la talla, no estar a la altura de lo que se me pide o simplemente no ser tan buena como los demás. Esto último merece que haga un hincapié, ya que como nos han dicho (y que tristemente ya he podido comprobar) es una profesión en la que hay mucha, muchísima competencia, rivalidad, ambición. Alguien me dijo una vez que en esto o eres el mejor o te comen, tienes que destacar. Y eso, mientras estas en el colegio o entre amigos, estás segura de ti misma y de tus capacidades, pero cuando llegas a un sitio en el que todos a tu alrededor quieren ser lo mismo que tú y que muchos de ellos son muchísimo mejores, la seguridad vuela tan alto que te planteas lo que vas a empezar a estudiar, y es cuando llegan las dudas. Yo todavía no las he tenido, supongo que porque todavía creo en mí y en lo que quiero llegar a ser, una periodista con cierta reputación. Porque hoy en día, por cada periodista, hay 10 cantamañanas que dicen trabajar en la comunicacion cuando al fin y al cabo, lo que hacen, es dejar la profesión del periodista por los suelos.